No quiero otros besos, ni otros abrazos. Ni otro numero de celular que me llame por las noches. Porque me encanta su sonrisa, la admiro. Adoro sus abrazos y sus locuras. Me encanta que me haga reír. Me gusta cuando me mira y sonríe sin ninguna razón. Adoro que me haga sus típicas bromas, aunque me enoje y crea que las odio. Adoro su forma de hablar, sus gestos y su aroma. Me encanta estar con él porque se me olvida absolutamente todo. Supongo que en realidad no adoro todo esto, sino me encanta porque lo hace ÉL.